65. La nuestra no es una caravana de desesperanza

En cualquier momento, aparece el ejercito de hormiguitas, siguiendo el contorno de esta montaña rosa. - ¿y si las hormigas fuesen ya los marcianos establecidos en la tierra?-. Al poeta Wallace Stevens le inquietaba la desenvoltura con la que las hormiguitas entraban y salían de su sombra. A mi me gusta verlas en caravana, tan unidas y tan leales; y me pone triste toparme con alguna solitaria, inquieta, sin saber donde ir. Quizá en las hormigas pensaba Rumi cuando escribió este poema:

Ven, ven


Quienquiera que seas


Vagabundo


Idolatra


Adorador del fuego



Ven


Aunque hayas roto tus votos mil veces



Ven y ven


Una vez más



La nuestra


No es una caravana de desesperanza.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

QUE HAY QUE HACER PARA UNIRSE A TU CARAVANA??? MIRA QUE SIENTO QUE ME PERDI Y NO SE DONDE IR.....Y...NO QUIERO QUE ESTES TRISTE..:(